domingo, 20 de septiembre de 2009

LOS TRIUNFOS Y LA PACIENCIA AUSENTES EN EL PALOGRANDE

Sebastián Llano Castaño

Después de perder el clásico ante el Deportivo Pereira hace ocho días con una goleada de 4-1, el hincha del Once Caldas tenía la esperanza de “sacarse la espinita” superando al Atlético Nacional en casa.

Muchos prefirieron quedarse en casa observando el encuentro por televisión mientras que otros se acercaron al internacional Palogrande para ver ganar al campeón colombiano. Todas las esperanzas del hincha caldense se fueron al piso cuando el primer tanto de la noche lo conseguía Ezequiel Maggiolo para alegría de los verdes de Medellín.

Dos balones en el palo, una hipérbole en los pelotazos, mal en zona defensiva e imprecisión en los pases hicieron que el blanco de Manizales perdiera confianza a lo largo del trascurso del partido. Sebastián Hernández que llegó como refuerzo para este semestre no encontraba su fútbol, le rebotaban los balones a la hora de recepcionarlos y no tenía profundidad en el ataque, hasta que llegó un centro desde la derecha que capitalizó con golpe de cabeza y fue el uno a uno en la fría noche manizaleña.

El onceno de Javier Álvarez siguió atacando por los costados con Luís Núñez quien insistió con los centros y pelotazos, pero fue más contundente la ofensiva que planteó el técnico Cabrero de Nacional y conducido por Giovanni Moreno, los de la capital de la montaña encontraron el 1-2 con el que sentenciaron el juego de los únicos campeones de Copa Libertadores por Colombia.

El Once es penúltimo en la tabla de posiciones con 8 unidades, dos más que Envigado que ocupa la casilla 18 en el finalización. El próximo encuentro de los blancos será el domingo 27 de local frente al Atlético Huila.